Realismo. Término confuso y de
muy difícil definición en lo que respecta a las artes plásticas pues en
general, sólo alude a una cierta actitud del artista frente a la realidad, en
la que no necesariamente su plasmación de ésta debe ser copia o imitación, pero
sí ajustarse a una cierta visión generalizada de la realidad; en este sentido
es donde se halla la diferencia del realismo con la figuración, en la cual se
pueden ver imágenes del mundo real pero distorsionadas según la propia visión
del artista.
En el realismo, el artista
aporta también su visión del mundo y da su interpretación pero utilizando unas
formas de la realidad tal y como todos los demás las vemos. Para matizar más el
problema se utilizan términos como naturalismo, verismo, hiperrealismo,
realismo fotográfico, realismo expresionista, realismo figurativo. Tendencia de
la pintura figurativa cuyo objetivo es tematizar el entorno cotidiano, tomado
directamente de la realidad. En algunos aspectos se opone al fotorrealismo y la
utilización de la fotografía.
Víctor Hagea utiliza imágenes de la vida cotidiana para
incluirnos en su universo pictórico
personal. Los marcos, las esculturas,
los cuadros dentro del propio cuadro, la repetición de imágenes con distintos
matices nos llevan directamente al mundo interior de este artista.
Manifiesta el autor: "Yo
he sido muy influenciado por los grandes maestros flamencos, holandés,
italiano, español y francés. VI en su trabajo multifacético varias ventanas
hacia lo absoluto. Luego Dalí me mostró qué tipo de posibilidades de
permanencia dentro del dominio de la "real" y lo que pueden hacer que
los artistas de la misma. Después de un tiempo de experimentar en varias
direcciones, como el cubismo, el constructivismo y el abstraccionismo y
mediante diversas técnicas, volví al tipo de pintura que mejor expresa quien
soy.
Siempre he soñado de la
pintura de esta manera, encontrar medios para capturar la naturaleza de la
realidad a través de formularios que trascienden lo pase y evanescente. La
filosofía hindú afirma que "la vida es un sueño," destacando una
frontera invisible que separa mundos diferentes entre sí y por lo tanto, las
respectivas "realidades" que corresponden a ellos. Hay algo en cada
"realidad" que trasciende su inmediatez física tomando la forma de
una proyección o emanación, superando así su corsé determinista y encontrar su
"super-reality" en un nivel superior.
Como forma es el hijo de
espacio, se purifica en la luz y vestidos a la sombra de la inusual. El
desconocido aparece modificado por la forma de la conocida, invitado a la
fiesta de las formas efímeras. El juego de luces y sombras abre la puerta al
mundo de la realidad polar que continuamente es traicionar a su estado inicial
por coquetear con su oponente. Dentro de esta escena de capricho dialéctico,
las vacaciones por la forma, traducida en su deseo de descanso no son más que
su deseo de aumentar a nacer de nuevo en el aspecto triunfante de la edad de
oro eterna. Una edad que pretende encabezar la identificación con el estado
inolvidable. El eterno es pulsante como si fueran las obvias, invita al
espectador a participar en el ritual a través del cual realidad está dejando el
pecho de sus propios prejuicios para regresar al paraíso que conocía una vez. Cortinas ocultando la
magia de la rendición del mundo en frente del ego valiente, explorador de
territorios vírgenes. Él está persiguiendo a sí mismo en el eterno movimiento
carrusel de Cronos, como si fuera a llegar a sí mismo por detrás y va más allá
de su propio ser. Es la ruta misteriosa de nubes de Magellan, navegando en
espacios indefinidos, viven en la cadencia de eternidad donde la melodía de los
péndulos suspender acompañan la canción de la arena deriva en la costa de la
efímera de la fantasía.
En el tormento polifónico
de un mundo dialéctico, el silencio omnisciente de las estatuas es nada más que
la música de las esferas no escrita. El ojo es el escenario de un espectáculo
donde el director se convierte en su propio actor a fin de superar la barrera
al final de la noche, encontrando así el mundo como una pieza de la poesía. El
inequívoco es decir adiós a su propio contexto, aceptando la invitación a los
viajes nunca comenzó cuyo destino será el conocimiento final. "
"Muchas obras
están en museos en Rumania y colecciones privadas de Alemania, Francia, Suiza,
Holanda, Canadá, Estados Unidos e Italia"