
La primera formación académica en el arte, inicia durante la temprana niñez. Donde una profesora en su país natal, la introduce al realismo y la pintura china. Continuó sus estudios autodidactas en Costa Rica y en el 2005 se especializó en la tiza pastel y el hiperrealismo. Durante estos años, así como posteriores, sus obras recibieron reconocimientos internacionales.
Francisca prosigue extendiendo su horizonte artístico, comunicando sus ideas y actitud positiva a través de sus diferentes técnicas aplicadas en un mundo compartido.
Ya en el 2008 y más extensamente en el 2009, la situación actual del planeta provocó un cambio en su temática, enfocando parte de su obra a producir un mensaje unido a la naturaleza, no sólo contemplativamente sino con acciones directas hacia el espectador.
Su obra destaca por su vigor, trazos impregnados de soltura y fuerza. La superación de las fotografías con su expresión figurativa, combinado en el híper realismo los acabados que sobresalen en sus pinturas.


